Paulito FG, leyenda de la salsa cubana, fallece en un accidente de tránsito

La Habana se viste de luto: El adiós inesperado de Paulito FG, el sonero de alma eterna"


Las calles de La Habana resuenan con un eco de tristeza, un lamento que se extiende por toda Cuba. El sábado, la voz inconfundible de Paulo Fernández Gallo, el legendario Paulito FG, se apagó en un fatídico accidente automovilístico, dejando un vacío irremplazable en el corazón de la música cubana. A sus 63 años, el sonero de alma eterna partió, dejando un legado que perdurará en el tiempo.

La noticia, confirmada por el maestro Alexander Abreu, líder de Havana D’ Primera, se propagó como un reguero de pólvora, inundando las redes sociales y los medios estatales de incredulidad y dolor. Paulito FG, nacido en La Habana en 1962, fue un faro de la salsa en la isla, un innovador que supo 


fusionar ritmos y emociones con maestría.

Desde sus inicios en diversas agrupaciones hasta la creación de su emblemática "Paulito FG y su élite", el cantautor dejó una huella imborrable. Su talento trascendió fronteras, llevando su música desde las calles de La Habana hasta los escenarios de Japón. Su primer álbum, "Tú no me calculas", fue un hito que resonó con fuerza en todo el mundo.

Paulito FG fue un alquimista de la música, capaz de mezclar la timba, la balada, el jazz y el son en un crisol de sonidos únicos. Su sello personal, reconocido por críticos y admiradores, lo convirtió en uno de los artistas más queridos y respetados de Cuba.

El presidente Miguel Díaz-Canel, junto a otras autoridades del país, expresó su profundo pesar por la pérdida del salsero. "Doloroso adiós al querido Paulito FG", escribió el mandatario en X, destacando su legado como parte esencial del patrimonio musical cubano. "Sus creaciones e interpretaciones son parte insoslayable del patrimonio musical cubano".

La Habana llora a su hijo pródigo, un artista que supo capturar la esencia de su pueblo y convertirla en música eterna. Paulito FG, el sonero de alma eterna, vivirá en cada nota, en cada acorde, en cada corazón que vibró con su música.


Las calles de La Habana resuenan con un eco de tristeza, un lamento que se extiende por toda Cuba. El sábado, la voz inconfundible de Paulo Fernández Gallo, el legendario Paulito FG, se apagó en un fatídico accidente automovilístico, dejando un vacío irremplazable en el corazón de la música cubana. A sus 63 años, el sonero de alma eterna partió, dejando un legado que perdurará en el tiempo.

La noticia, confirmada por el maestro Alexander Abreu, líder de Havana D’ Primera, se propagó como un reguero de pólvora, inundando las redes sociales y los medios estatales de incredulidad y dolor. Paulito FG, nacido en La Habana en 1962, fue un faro de la salsa en la isla, un innovador que supo fusionar ritmos y emociones con maestría.

Desde sus inicios en diversas agrupaciones hasta la creación de su emblemática "Paulito FG y su élite", el cantautor dejó una huella imborrable. Su talento trascendió fronteras, llevando su música desde las calles de La Habana hasta los escenarios de Japón. Su primer álbum, "Tú no me calculas", fue un hito que resonó con fuerza en todo el mundo.

Paulito FG fue un alquimista de la música, capaz de mezclar la timba, la balada, el jazz y el son en un crisol de sonidos únicos. Su sello personal, reconocido por críticos y admiradores, lo convirtió en uno de los artistas más queridos y respetados de Cuba.

El presidente Miguel Díaz-Canel, junto a otras autoridades del país, expresó su profundo pesar por la pérdida del salsero. "Doloroso adiós al querido Paulito FG", escribió el mandatario en X, destacando su legado como parte esencial del patrimonio musical cubano. "Sus creaciones e interpretaciones son parte insoslayable del patrimonio musical cubano".

La Habana llora a su hijo pródigo, un artista que supo capturar la esencia de su pueblo y convertirla en música eterna. Paulito FG, el sonero de alma eterna, vivirá en cada nota, en cada acorde, en cada corazón que vibró con su música.


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